El lugar estaba sucio, tenía telarañas de muchos (muchos) días y había muchas arañas (vimos 4 arañas vivas en la baño a la vez, y 2 muertas en su telaraña, y una araña grande -grande- caminando en la cama). Considerando el precio que tiene, la habitación es de feo aspecto y el baño también. Además, el lugar estaba muy descuidado y no representa lo que se ve en las fotos, para nada. Por ejemplo, el bar que tiene no está en uso en la actualidad. La iluminación del living y cocina era pobre, y la cocina no está bien equipada. Cocina y living son muy pequeños, incluso es incómodo si hay más de 1 persona queriendo cocinar, y no hay lugar para que coman más de 4 personas al mismo tiempo adentro. Además, el precio de la habitación (doble matrimonial con baño privado) es mucho mayor al de hostels buenos en el centro de la ciudad de Mendoza (pagamos $250 por noche, y en un hostel en el centro de Mendoza $150 por una habitación más grande), y casi comparable con el de departamentos de 1 dormitorio en el centro de la misma ciudad (cuando decidimos dejar el hostel, de apuro encontramos uno por $300 la noche). Lo único lindo es el jardín exterior (muy amplio y bien cuidado, con césped verde) que sí es como se ve en las fotos. Hay una linda vista a las montañas, y la zona es muy tranquila. Si, por ejemplo, tiraran abajo el hostel y dejaran acampar, sería un buen lugar. Adjunto fotos del hostel, tomadas por mí, para que vean de lo que hablo y conozcan mejor el lugar (fotos de la habitación, el baño, las arañas y telarañas que encontramos y la cocina).…